Calabaza asada rellena

La calabaza asada rellena es un plato reconfortante, nutritivo y perfecto para el otoño o invierno. Se utiliza calabaza tipo violín, asada hasta quedar tierna y con un sabor concentrado, que luego se rellena con una mezcla cremosa de espinacas, cebolla, ajo, nata, leche y queso rallado. Esta combinación se espesa con una bechamel ligera, aromatizada con nuez moscada, y se gratina al horno hasta que la superficie queda dorada y crujiente. Es ideal como plato principal vegetariano, elegante para una ocasión especial o una comida saludable y sabrosa. El contraste entre la dulzura de la calabaza y el sabor de la crema con queso convierte esta receta en un acierto seguro.

Ingredientes

• 2 calabazas violín pequeñas
• 300 g de espinacas limpias
• 1 cebolla, 2 ajos
• 200 ml de nata
• 50 g de harina
• 25 g de mantequilla
• 400 ml de leche
• 100 g de queso para gratinar
• Nuez moscada, cebollino picado
• Aceite, sal

Instrucciones

1. Partimos las calabazas por la mitad a lo largo y retiramos las hebras y semillas. Las ponemos en la placa, las salpimentamos y regamos con un poco de aceite y las asamos 45 min a 180º. Vaciamos el interior dejando un borde y machacamos la pulpa.
2. Lavamos las espinacas. Picamos la cebolla y los ajos y los pochamos en una cazuela con aceite. Añadimos las espinacas y rehogamos 5 min más. Incorporamos la pulpa de calabaza y reservamos. Fundimos la mantequilla en la misma cazuela y tostamos la harina durante 1 min.
3. Vertemos la nata y la leche calientes, cocemos hasta que espese y condimentamos con sal, pimienta y nuez moscada. Reservamos la mitad y añadimos al resto la preparación de espinacas. Rellanamos las calabazas con esta crema y cubrimos con el resto de besamel y el queso. Gratinamos 15 min a 200º y servimos con el cebollino.