Pollo al Ajillo: Un Clásico Mediterráneo Tierno y Jugoso

Sin duda alguna, el pollo al ajillo es una de las recetas más queridas and sencilla de la gastronomía española. Si estás buscando un plato con mucho sabor a ajo, carne tierna, y una salsa excelente que pide a gritos un buen trozo de pan, esta es la receta que buscas.
La magia de este pollo al ajillo tradicional no está en la complejidad de la receta sino en la técnica: primero, se aromatiza el aceite de oliva en una cazuela de barro a baja temperatura con los ajos (cuidado, porque si no se queman, amargarán). Se sella luego (tras el aromatizado) el pollo pero en ese aceite aromatizado. Al final, desglasamos con un vino blanco, el hecho de desglasar provoca una base de sabor, una profundidad muy buena y el brillo de la salsa.
Receta fácil, rápida, para una cena entre semana, pero el resultado es tan espectacular que no te costará quedar como un maestro de los fogones. Pasarán 20 minutos de cocción suave para conseguir un pollo que se desprenda del hueso y una salsa espesa y brillante.

Ingredientes

• 1 pollo troceado (sin vísceras ni cabeza)
• 4 dientes de ajo picados
• 1 guindilla seca (opcional)
• ½ vaso de vino blanco
• ½ vaso de agua
• 1 ramita de romero fresco
• 2 cdas de aceite de oliva virgen extra
• Sal y pimienta al gusto

Instrucciones

1. Prepara los ajos: pélalos y pícalos finamente.
2. Limpia el pollo: sécalo bien, añade sal y pimienta, y dóralo por todos lados en una sartén grande con aceite de oliva hasta que esté dorado.
3. Retira el pollo y en el mismo aceite sofríe los ajos hasta que se doren ligeramente.
4. Agrega la guindilla (si deseas un toque picante) e incorpora nuevamente el pollo a la sartén.
5. Vierte el vino blanco y deja cocinar durante 4 a 5 min para que se evapore el alcohol.
6. Añade el agua y el romero, tapa la sartén y cocina a fuego medio durante 15 min, moviendo ocasionalmente para que no se pegue.
7. Sirve caliente, acompañado de pan o papas, y disfruta de un pollo tierno con una salsa sabrosa y aromática.